Las picaduras de estos artrópodos pueden ser mortales sin atención médica inmediata. Este tipo de accidentes provoca hasta 8.000 casos anuales en Argentina, con una mortalidad que puede llegar hasta ocho víctimas por año.
La picadura de un alacrán causó la muerte de una beba de un año y ocho meses en Formosa, durante la madrugada del viernes 18 de octubre. La pequeña había ingresado a un centro de salud de la localidad de Laguna Naineck, y falleció en el traslado al Hospital de La Madre y el Niño por la gravedad de sus síntomas. Un caso similar se registró este mes en Santiago del Estero, cuando un niño de siete años perdió la vida en la Unidad de Terapia Intensiva del Cepsi tras ser picado por otro alacrán en Sumampa.
Según la Asociación Toxicológica Argentina, “en las últimas décadas, las picaduras por escorpiones (alacranes) representan la mayor cantidad de accidentes por animales venenosos en Argentina, con una cantidad anual que ronda los 8.000 casos y una mortalidad que oscila en 2 y 8 víctimas fatales al año”. Por lo cual, advierten que es esencial buscar atención médica de manera inmediata luego de una picadura para evitar complicaciones fatales.
Compartir